Que se respete la voluntad del pueblo hondureño…

Frase tan repetida por diferentes periodistas y candidatos políticos. De un partido a otro se acusan mutuamente de posible fraude y de ambos lados se están creando mecanismos para prevenirlo. Desde Libre se asegura que su método de conteo de votos es el más seguro y fiable, mientras que desde el partido Nacional se realizan las mismas aseveraciones. Pero lo que sí es cierto es que desde el gobierno se tienen más medios y medios más fuertes de prevenir el supuesto fraude; la militarización de todas las empresas nacionales y medios de comunicación, sobretodo en zonas cercanas a empresas nacionales y el Tribunal Supremo Electoral. Las ciudades se están militarizando para evitar la irrupción de grupos violentos ante un resultado no favorable. Tantos los afiliados y seguidores de un partido como de otro están dispuestos a defender su elección. Resulta difícil aventurarse en un mundo de posibilidades donde los medios de comunicación ofrecen información polarizada y realizan aseveraciones contundentes y provocadoras. Pasear por la ciudad un día como hoy supone un encuentro con los militares casi continuo, Y digan lo que digan, a mí personalmente, los militares me generan más miedo que paz y tranquilidad, con sus metralletas listas para usarse en caso de crisis.